Silestone es un material de gran dureza y resistencia que puede aguantar en perfectas condiciones durante muchos años, soportando todo tipo de golpes o arañazos. Este material está formado por cargas inorgánicas minerales, principalmente de cuarzo compacto (94%) y por pequeños pigmentos, restos de resinas y aditivos (6% restante) que le proporcionan las cualidades para que sea tan resistente y duradero. De hecho, el tratamiento especial que recibe la piedra de este material potencia su resistencia a los impactos y al desgaste propios del día a día.
El Silestone es otro tipo de superficie artificial que imita el mármol, granito y otras piedras naturales con ventajas parecidas al Dekton. En primer lugar es más asequible que el Dekton, pero su uso ideal es en interiores para evitar que le afecte la exposición prolongada a luz solar. Es más, su resistencia a rayaduras, manchas y golpes lo hacen la selección principal para las reformas de cocinas de pisos, casas, adosados.
De hecho estos materiales también se pueden utilizar en pavimentos o revestimientos. Es una elección muy acertada porque las propias piezas hechas de mármol, Dekton o Silestone, como pueden ser las encimeras de cocinas, se convierten en elementos únicos pensados para perdurar en el tiempo.
¿Cuáles son las ventajas de Silestone?
Silestone es el matiz de distinción y funcionalidad que tu cocina necesita. Sin lugar a dudas, introduce la belleza del cuarzo en tu hogar y proporciona a todas las estancias de tu vivienda elegancia y resistencia. Su baja porosidad garantiza la no-absorción de líquidos. Por eso decimos que es una superficie con una elevada resistencia a las manchas. A su vez, el cuarzo es uno de los minerales con mayor dureza, siendo de esta manera un material que presenta una enorme resistencia a la agresiones externas, como por ejemplo los ácidos comunes de la cocina en su uso diario.
A diferencia de otros materiales, como por ejemplo el granito u otro tipo de superficies sólidas, presenta una mayor resistencia a cualquier tipo de impacto. Y además, dada la dureza natural del cuarzo, presenta una resistencia muy elevada al rayado, por lo que tu encimera de cocina se conservará a la perfección ante tus tareas diarias. Por otra parte, la protección bacteriostática Microban impide la proliferación de bacterias. Asimismo, podremos limpiar la superficie directamente con jabón y agua: su mantenimiento es mínimo.
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